La preocupación volvía a instalarse entre los muchos seguidores de María Teresa Campos. Los varios sustos de salud que ha protagonizado la presentadora en los últimos meses han hecho que cada uno de sus movimientos se escrute al máximo. La alarma saltaba cuando los reporteros podían comprobar que la matriarca de las Campos acudía, de nuevo, al hospital. ¿Una nueva complicación en la evolución de su último ingreso? Por suerte, era la propia presentadora la que aclaraba todos los detalles...

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No gana para disgustos. María Teresa Campos ha tenido que hacer frente a varios problemas de salud no exentos de gravedad. La presentadora era ingresada de urgencia en mayo del año pasado por un ictus. La rapidez de actuación hizo que las consecuencias fuesen leves. Tras unos días ingresada, con la lógica preocupación de su familia, volvía a reaparecer en público para agradecer las enormes muestras de cariño recibidas. Pero no quedaba ahí la cosa.

Cuando pensábamos que ya se encontraba totalmente recuperada, la presentadora volvía a hacer saltar las alarmas con un nuevo ingreso. En esta ocasión se trataba de una suboclusión intestinal, y pese a que los médicos habían descartado la gravedad desde el primer momento, terminó pasando por quirófano para poder evolucionar en la recuperación. Lógicamente, con estos antecedentes recientes, se han extremado las precauciones y también el interés acerca de la salud de la matriarca de las Campos.

Eran los reporteros los que encontraban a la presentadora llegando al hospital hace pocas horas. Por su propio pie y acompañada de su chófer y una amiga, María Teresa quiso aclarar los motivos de su visita al centro hospitalario antes de que comenzasen a correr los rumores. “Tengo el alta definitiva”, aseguraba, tal y como recoge ABC. “Seguiré viniendo todas las semanas al fisio como desde hace seis años”. La presentadora quería aprovechar para calmar los ánimos de cara a los próximos días.

A ver si cada vez que venga al fisio vaya a parecer que me he puesto mala”, declaraba. María Teresa sabe que todo el mundo está muy pendiente de ella y prefiere hablar antes de que se especule. Lo mismo han hecho sus hijas, Terelu y Carmen, durante sus ingresos. En todo momento han ofrecido información y han atendido a la prensa. Un ejemplo que deberían seguir muchos más rostros populares.