Los médicos le han dado la baja a Kiko Rivera después de que hace una semana confesara que padece depresión. Todos los esfuerzos y las múltiples visitas a centros de salud que ha estado haciendo los últimos días se han concentrado en conseguir un parte médico que el dj ha enviado a promotores, ayuntamientos de las ciudades donde ha cancelado los bolos y a algunos medios como 'Sálvame'. Junto al documento ha difundido una carta en la que pide máxima discreción a propósito de la dolencia que le aqueja y que tiene a todo su entorno preocupado.

“Este documento es confidencial y de carácter estrictamente reservado, por lo que cualquier filtración a terceros podría determinar la correspondiente responsabilidad”, leía Jorge Javier Vázquez en directo. Por lo pronto, nada más se va a saber acerca de lo que le pasa, pero sí que se ha dado a conocer los puntos decisivos de las recomendaciones médicas que ha recibido el hijo de Isabel Pantoja y que tendrá que seguir a partir de ahora para volver a estar al 100%. Con esta baja médica ha podido justificar su ausencia laboral y la cancelación de sus bolos.

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La afección que sufre Kiko Rivera está siendo tratada desde la rama de la psiquiatría, especialidad en la que ha estado visitándose en el Hospital Vithas Nisa de Sevilla. Según testigos con los que ha estado hablando José Antonio León, habrían visto al dj con semblante serio y siempre bajo la atenta atención de su mujer Irene Rosales. Los testimonios han afirmado que "había muchas muestras de cariño", entre ellos. Definitivamente, su unión se ha hecho más fuerte y estrecho ante esta adversidad.

Según el reportero de Telecinco, el artista habría recurrido a un psiquiatra privado para conseguir un informe que corroborara su dolencia.

Dado que su estado de ánimo y sus aptitudes se han visto afectadas por este mal, Kiko se ve incapaz de bregar con su agenda profesional y sus compromisos laborales. Según Cotilleo.es, al primo de Anabel Pantoja le ha recomendado reposo, descanso y desconexión en su casa. Asimismo, deberá seguir al pie de la letra las recomendaciones que le han hecho los psicólogos que le han atendido, a la espera de pasar un nuevo control médico que determine si continúa de baja. Según José Antonio León, y relacionado con estas pautas, Kiko habría estado buscando un centro en el que enseñan técnicas de relajación.

Por lo que ha podido saber Jaleos de El Español, la baja de Kiko, firmada por un médico de su centro de cabecera de Castilleja de la Cuesta (Sevilla), será en principio por seis meses, aunque "no se recoge ningún diagnóstico específico de enfermedad, ni tampoco del tratamiento que durante estos seis meses deberá recibir".