Aquello de "cuando habla sube el pan" se le ha quedado un poco corto estos días a Jordi Cruz. Con sus últimas declaraciones no es que haya subido el pan, sino que se ha disparado a unos niveles que ya no le puede pasar desapercibido a nadie.
El cocinero la ha liado con su opinión sobre los becarios. A raíz de un reportaje de 'El Confidencial' sobre la precariedad laboral en la alta cocina y la figura de los 'stagier', los becarios en los restaurantes con estrella Michelín, Jordi Cruz defendía: "Me molesta que se hable del trabajo del 'stagier' como algo negativo, como si fuera un abuso o una mala práctica". Lejos de quedarse ahí, el jurado de 'Masterchef' añadía: "Estás aprendiendo de los mejores en un ambiente real, no te está costando un duro y te dan alojamiento y comida. Es un privilegio. Imagínate cuánto te costaría eso en un máster en otro sector… Podría tener solo a 12 cocineros contratados y el servicio sería excelente, pero si puedo tener a 20, será incluso mejor. Las dos partes ganan. Es un 'tú me das tus manos y yo te enseño".
La manera en la que Jordi Cruz ha presumido de no pagar a casi la mitad de su plantilla porque "es un privilegio" para ellos ha incendiado las redes sociales. Y más después de que hace tan solo unas semanas se conociera la noticia de que Jordi y su novia se han comprado un palacete en Barcelona por tres millones de euros. Durante todo el fin de semana Twitter se ha llenado de críticas y mensajes negativos hacia el cocinero. Tanto es así, que incluso se han empezado a popularizar los hashtags "boicotjordicruz" y "boicotmasterchef". Habrá que ver si, finalmente, la polémica acaba afectando a 'Masterchef', el programa en el que Jordi Cruz ejerce de jurado.