La vida de Ivonne Reyes cambió de manera drástica hace un mes cuando falleció su hermano. Además, para añadir más complicación a su existencia, Pepe Navarro se sometía a unas pruebas de paternidad en secreto, mientras continua negando de manera tajante que el hijo de Ivonne sea suyo, pese a que un juez dijo lo contrario hace seis años.

Poco a poco la vida de Reyes se normaliza y la sonrisa vuelve a aparecer, de manera sincera, en su rostro. Vuelven las quedadas con amigas, las confesiones a media voz, las risas despreocupadas… vuelve, en resumen, su vida de antes. Regresa la Ivonne de siempre, divertida y optimista. Pero para que esta regrese, ha sido necesario que la otra aflore, la rota de dolor que aún a día de hoy continúa sin asumir que su hermano ya no está con ella y su hijo, para el que fue como un padre. “Avanzando.. Sin dejar de ser, sin dejar de estar. Más fortalecida, firme, con la certeza de saber que estoy protegida y ayudada”, escribía en las redes sociales.

La presentadora asistió el fin de semana a un evento organizado en el hipódromo de Madrid, donde pasó una tarde “mágica” con Vania Millán y Carmen Lomana entre otras amigas. La venezolana, poco a poco trata de volver a saborear lo que es la felicidad sin olvidarse de los que ya no están a su lado, que son, para ella, unos verdaderos ángeles guardianes, que la protegen y la acompañan en cada momento.