La séptima gala de 'Supervivientes 2018' no ha dejado indiferente a nadie. ¿El motivo? Hemos tenido de todo. Sin embargo, uno de los momentos más vengativos de la noche lo hemos vivido cuando Isabel se ha convertido en la tercera expulsada definitiva de este reality. Ha sido entonces cuando Jorge Javier le ha explicado que iba a ser la encargada de inaugurar algo llamado 'Beso de Judas'. "Puedes darle un punto extra de nominación a alguno de tus compañeros", le comunicaba Jorge. "Pues se lo voy a dar a Francisco por los problemas en la convivencia que hemos tenido esta semana". ¡Menudo regalito!
Está claro que Francisco ha sido uno de los ejes principales de esta gala. La mayoría de los concursantes aseguran que es muy difícil convivir con él y él parece no querer cambiar de actitud. Incluso Alberto Isla ha tenido algún desencuentro con el cantante. Como era de esperar, Francisco ha sido uno de los nuevos nominados junto a Hugo, Melissa y Alberto Isla. ¿Quién abandonará la isla la próxima semana?
La gala también ha estado marcada por la ausencia de Raquel Mosquera. Tras encontrarse indispuesta el pasado martes durante 'Supervivientes: Tierra de Nadie', el equipo médico del programa le recomendó que no hiciese esfuerzos. En su intento por demostrar que ella puede con todo, la peluquera no les hizo caso y un día más tarde era evacuada de Cayo Paloma por encontrarse muy débil. Para que familiares y público se quedasen tranquilos, Jorge Javier conectó con ella y esta aseguró que estaba mejor y que pronto volvería a la carga.
Mayte Zaldívar también pisó el plató por primera vez tras ser expulsada la semana pasada, y lo hizo bajo la atenta mirada de Saray, pero ninguna de las dos quiso entrar en polémicas. No así Sofía quien protagonizó una discusión con Romina y María Jesús después de que estas se metiesen con ella por el físico. En cuanto a las pruebas de líder, Romina y Sergio se alzaron con la victoria en sus respectivos grupos.