Los ánimos estaban muy crispados este martes en 'Sálvame' y a veces domar las actitudes beligerantes que despiertan ciertos temas en los tertulianos es una empresa imposible para los presentadores. Los mensajes de María José Campanario desataron la bronca entre Carlota Corredera y Kiko Matamoros. Hacía relativamente poco que el colaborador había estado hablando largamente sobre este aspecto pero, parece que se le habían quedado cosas en el tintero cuando Lydia Lozano, que previamente había pedido la palabra, se disponía a dar su opinión y él la interrumpía. Matamoros se molestaba haciéndole un gesto despectivo con las manos a Corredera.

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Si algo ha quedado demostrado entre el equipo de 'Sálvame' es que es peor a largo plazo que las cosas se enquisten. Muy ofendida, Carlota no quiso que se quedara en el olvido lo que ella había interpretado como una falta de respeto de Kiko. "Te voy a pedir de aquí en adelante que las tardes que esté yo, si no te doy la palabra cuando tú ya has podido hablar, no me hagas esos gestos, porque parece que yo no estoy repartiendo de manera equitativa los tiempos de palabra", le decía a Matamoros con un tono serio y visiblemente enfadada. El tertuliano había hecho un aspaviento con los brazos, y alegaba que "llevo una hora pidiendo la palabra". Las maneras de Kiko a Carlota le habían parecido no solo "una falta de respeto", sino una muestra de falta de generosidad para con el resto de compañeros, en este caso de Lydia. "Todos queréis hablar de los mismos temas, pero los turnos los doy yo. Lydia tiene derecho a hablar también", afirmaba.

Entonces, Kiko le ha acabado echando en cara a Carlota de que su llamada de atención fuera "abusiva". La conductora rebatía su opinión alegando que él había "podido hablar antes diez minutos sin que nadie te interrumpiese". El colaborador se mostraba incrédulo ante esta afirmación y, aún más enfadada y para zanjar el tema en seco, Carlota ha acabado pidiendo que se minutara la última intervención de su compañero.