El torero Fran Rivera (41) sufrió una gravísima cornada durante la primera corrida de la Feria de San Lorenzo en Huesca. El pitón de Freidor, cuarto toro de la tarde, lo tuvo suspendido en el aire durante unos segundos que se hicieron eternos y la plaza enmudeció. El torero, con evidentes signos de dolor, resultó herido en la zona del bajo abdomen, cornada de la que fue intervenido en la misma plaza de Huesca por el equipo médico del doctor Enrique Crespo, cirujano taurino.
La operación duró una hora y media y, según explicó el doctor en exclusiva para Lecturas, Fran empezó a hablar igual que lo hizo su padre en la fatídica corrida de Pozoblanco: “Me dijo: ‘Doctor, la trayectoria va para arriba’. Al oír eso, pedí que le sedaran del todo porque se me partía el alma. Ha sido una cornada terrible, ha podido morir en la plaza”, explica Crespo.

 

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