Por CONCHI ÁLVAREZ DE CIENFUEGOS

 

Nick Gordon, novio de Bobbi Kristina, ya no aguanta más estar separado de la joven y tras haberse tatuado su nombre y sin que la familia de ella lo deje poner un pie en el hospital, ha empezado a arremeter contra todos ellos, especialmente, contra el padre de la joven.

 

De Bobby Brown, ex marido de Whitney Houston, el joven ha dicho que hasta ahora nunca se había interesado por su hija. “En los últimos 5 años tan sólo la ha visto 4 veces”, se lamentaba. Como él no puede acercarse al hospital en el que permanece ingresada Bobbi desde el día 30 enero debido a la orden de alejamiento que pesa sobre él, Nick se está valiendo de las redes sociales para volcar toda la frustración que esto le produce. Y si su abogado dijo a los medios que él lo único que deseaba era que la joven se recuperara lo más pronto posible, él, que se la encontró inconsciente en la bañera de su casa, ahora ha decidido abrir la caja de los truenos y no dejar títere con cabeza.

 

“Desearía poder cambiarme por ella”, ha dicho en uno de sus tuits más sentimentales. Pero también tiene palabras de profundo desprecio hacia toda la familia Brown, comenzando por Bobby: “Al final fui yo quien me encargué de Whitney Houston y Kriss (la joven), algo que fue muy duro para una persona de mi edad. ¡¡Ellas lloraban en mi hombro!!” o “Él (Bobby) tan sólo está ahí para conseguir publicidad (…) Lo que quieren es el dinero de Whitney, que pertenece a Krissy y a Cissy (la madre de Houston)”.

 

Mientras la guerra abierta entre Gordon y Brown se desarrolla en la red y a través de sus abogados, Krissy, como Nick la llama, lucha por su vida cada día en el hospital de Georgia en el que se mantiene en coma, y donde le practicaron recientemente una traqueotomía para asegurarse que la joven pudiera respirar y no se le cerraran las vías respiratorias.