Por JULIA GUINOVART

 

Como presidente de Estados Unidos, Barack Obama tiene que dar muchos discursos. Hay uno especialmente importante para su familia: el de Acción de Gracias, puesto que el mandatario convoca a los periodistas, que pueden ir con sus hijos. Así que allí están también las hijas de Obama, Sasha y Malia. El miércoles, su padre hablaba en público para medio mundo y ellas, cansadas, quizás, le miraban con gesto aburrido. ¡Ni que los republicanos les hubieran pedido este favor! Con cara de fastidio, las hijas adolescentes del presidente se comportaron como tal y miraban a su padre con cara de estar pensado: 'Será pesado'. De eso no se libra ni el presidente de la primera potencia mundial.

 

Aunque se rieron en algún momento y ¡hasta aplaudieron! a su padre, la web de la casa Blanca ha colgado un vídeo en su página en el que se ve claramente como las chicas se aburren soberanamente con las bromas de su padre. Parece incluso que estén enfadadas.

 

 

 

Este jueves es el Día de Acción de Gracias y la familia Obama lo celebrará tradicionalmente, como se hace en Estados Unidos todos los años el último jueves de noviembre. Al igual que el resto de familias estadounidenses, Obama y su familia acudieron el miércoles a uno de sus actos más solidarios: repartir comida a los más necesitados.

 

En la Iglesia St. Columbanus pudimos verlos cerca de todos aquellos que les felicitaban las fiestas. Fueron necesarias horas de cola para todos aquellos que recibieron tanto de las manos de Obama, como de su mujer, Michelle, y de sus dos hijas, los alimentos que contenían las bolsas: pollo, patatas, naranja spaghetti, café y otros productos de necesidad.

 

El presidente de Estados Unidos, lejos de la Casa Blanca, estuvo muy atento y simpático con todos lo que allí estaban. Admitió con cierta tristeza: "Me han dicho que el porcentaje de personas que vienen hasta aquí ha incrementado un 30% desde el año pasado", por lo que se esforzó mucho para complacer a todos.

 

Muy abrigados debido a las bajas temperaturas, quisieron vivir de cerca el sufrimiento de muchos de los ciudadanos, que lejos de las comodidades que ellos tienen, sufren muchos problemas. "Quiero que mis hijas sepan lo afortunadas que son y que deben corresponder con los que menos tienen", afirmó Obama. En cuanto a sus planes para este Acción de Gracias, los Obama comentaron: "Reuniremos a un gran grupo de personas en casa".

 

Como ya es tradición, con el indulto del pavo se da el pistoletazo de salida al día familiar por excelencia, el día de Acción de Gracias, que en Estados Unidos se celebra , así se llaman los pavos que han conseguido salvarse del horno este año. Obama, acompañado por sus dos hijas, aprovechó la ceremonia para hacer un guiño político e hizo alusión a su última gran medida: la regularización por decreto de más de 5 millones de inmigrantes indocumentados.

 

La ceremonia se celebró este año en el interior de la Casa Blanca debido al mal tiempo que está sufriendo el país durante estos días. El temporal de nieve ha provocado que muchos vuelos se cancelen precisamente en un día tan importante como este. Peor los americanos están acostumbrados, puesto que suele ser otra tradción de Acción de Gracias: el mal tiempo.