Siempre hay un buen motivo para sonreír. Por muy difícil que parezca todo, por muchos obstáculos que se nos presenten en el camino, por muy dura que sea la vida, siempre podremos encontrar algo donde agarrarnos y sacar fuerzas. Eso Rosario Mohedano lo tiene muy claro. La cantante sabe perfectamente cuál es su centro de gravedad y qué le da el ánimo suficiente para salir todos los días a la calle y dar lo mejor de sí. Y a eso ha querido dedicarle unas palabras salidas directamente del fondo de su corazón...
No está siendo un buen momento para la familia Mohedano. El enfrentamiento entre Rocío Carrasco y Antonio David ha removido los cimientos del clan y ha obligado a posicionarse a cada uno de sus miembros. La mayoría lo ha hecho de parte del ex guardia civil, pero hay quién confía en la hija de Rocío Jurado. Su prima Rosario, por ejemplo, que ha sido nombrada como testigo de parte de Rocío de cara al juicio.
Con todo, Rosario no se deja arrastrar por las polémicas. La cantante recorre España de plaza en plaza, trabajando sin parar y combinando la época de más conciertos con las vacaciones de sus pequeños. Una tarea nada fácil que la hija de Rosa Benito trata de llevar de la mejor forma posible. De hecho, ha sido a sus tres hijos a los que ha querido dedicarles unas preciosas palabras de gratitud.
“Llegasteis a mi vida alborotando cada rinconcito de mi alma”, ha escrito la cantante en sus redes sociales. “Llegasteis para que viviese la realidad pero sin olvidar la magia”. Rosario no puede estar más encantada con su faceta como madre. “Con vosotros, cada momento es una aventura emocionante. Estando juntos las risas inundan nuestros pasos, el cariño nos agarra de las manos”.
“Gracias por todo el bien que hacéis en mí y por hacerme creer con vuestras sonrisas que no lo hago tan mal”, ha compartido la cantante, que también siente el miedo lógico de cuando quieres mucho a alguien. “Miedo a no ser mejor cada día para vosotros, a perderme un momento crucial de vuestra vida. Ese es mi miedo”.
¡Qué bonitas palabras! Seguro que los pequeños, cuando sean más mayores, sabrán valorar la entrega y el esfuerzo que Rosario hace cada día. Además, tener una madre -y una abuela- artista es todo un lujo. ¿Heredará alguno de ellos las cualidades musicales de la familia Mohedano Jurado? Igual tenemos que esperar un poquito para saberlo...