Tener una gran intuición para la cocina y los sabores, y sobre todo, haber mostrado una gran evolución durante el concurso, fueron los factores que convirtieron a Vicky, una carnicera mallorquina en paro, en la flamante ganadora de la segunda edición de ‘Masterchef’.

Frente a un jovencísimo Mateo que no tuvo su mejor noche, Vicky despuntaba con cada plato que presentaba al jurado, formado en la gran final de ‘Masterchef’ además de por los habituales, Samantha, Jordi y Pepe, por los hermanos Roca, Jordi y Joan. Los chefs no daban crédito a los platos presentados. Mostraban un gran nivel, pero, sobre todo, una gran “intuición”, una de las bazas más importantes que ha tenido Vicky, puesto que ella es puro corazón y se guía más por este que por su cabeza. Con una combinación de sabores hecha desde las entrañas, con lo que a ella le gustaría verdaderamente probar y comer, presentaba su primer plato, y este funcionó de tal manera que hasta Jordi Roca le dijo que pensaba copiar esa ensalada con espárragos hecha en homenaje a una hacía el padre de la ganadora, y que cautivó a este cocinero, propietario junto a su hermano del segundo mejor restaurante del mundo.

Y si bueno fue su primero, mejor fue se segundo, un pez raya con mantequilla de tomate acompañada de arroz negro con ali oli. Sabores tradicionales del mediterráneo pero con un giro muy interesante. Además, Vicky demostró que su emplatado había mejorado considerablemente. Ahora, como ella dice, apuesta por ‘lo fino’, demostrando que su paso por el concurso le ha servido para refinar su cocina y mejorar la estética de sus platos, porque el sabor ya lo traía ella de casa. Ella era un diamante en bruto que necesitaba una buena pulida para brillar como verdaderamente se merecía.

El punto y final a su menú de tres platos lo puso el postre, una versión del dulce que hace Jordi en el Celler de Can Roca, una mousse de aguacate con piña y queso quark. Al jurado le resultó atrevido, diferente y refrescante.

Tas dejar a todos con la boca abierta, Vicky se convirtió, por fin, en la ganadora del título de Masterchef España, 100.000 euros, una beca de cocina en el prestigioso Le Cordon Bleu, y su propio libro de recetas, donde dijo que encontraríamos algunos de los platos de su padre, que tan buena suerte le ha dado, además de otros de sus familiares, que parecen tener la misma buena mano que ella.