Prácticamente ya la tenemos encima: la Navidad. Esa época del año que si hay una persona en el mundo que la disfrute más que los pequeños de la casa esa es Mariah Carey. Su versión de 'All I want for Christmas' ya es la banda sonora de las fiestas invernales actuales, aunque oírla cantar vestida de Mamá Noel se ha convertido en un clásico moderno, para bien o para mal. Mariah canta villancicos. Kiko Rivera ataca a 'caramelazos' a los Reyes Magos de su pueblo. Cada uno de ellos, vive esos días como quiere, pero no es ésta la coincidencia que les une. Ni tampoco la música ni que sienten auténtica devoción por sus hijos.
En cuestión de un breve periodo de tiempo, la cantante estadounidense ha empezado a lucir una figura mucho más estilizada de lo habitual. Y ni nos lo inventamos ni lo estamos sacando de los famosos y polémicos 'photoshops' que salpican su cuenta de Instagram y con los que siempre ha perseguido disimular sus curvas. En poco menos de tres meses, Mariah ha perdido volumen, sobre todo, en caderas y vientre. Carey es una mujer de bandera con un físico rotundo, sin contar cómo ha adecuado partes de su anatomía a la imagen con la que más satisfecha se siente, como es la mamoplastia a la que se sometió para aumentarse el pecho y hacerlo más exuberante.
Su nueva figura no responde ni a una dieta milagro ni a los corsés que usan las Kardashian ni a una vida espartana dedicada en cuerpo y alma al ejercicio físico extremo. Como Kiko Rivera y su prima Anabel Pantoja, Mariah Carey se ha sometido hace aproximadamente un mes a una cirugía de banda gástrica. Los resultados saltan a la vista y no hay que echar la vista muy atrás para evidenciar que, por ejemplo, este verano no solo exhibía más peso sino que, además, estaba hinchada. Fue justo este síntoma y el hecho de que cada vez le resultaba más difícil realizar los movimientos de las coreografías lo que la ha llevado a pasar por el quirófano para hacer más fácil la pérdida de peso. Según una fuente cercana a la artista, Mariah, que siempre ha estado muy orgullosa de su cuerpo exuberante, ha reconocido a su entorno que ahora se siente mejor.