Ni siquiera que el equipo de sus amores, el Real Madrid, se haya clasificado para la final de la Champions League, no consigue disipar los nubarrones que sobrevuelan la cabeza de Toño Sanchís desde que fuera condenado por la justicia a pagar 600.000 euros más costas a Belén Esteban. Este primero de mayo el manager de famosos y tertuliano televisivo celebraba su cumpleaños. Una fiesta desdibujada sin duda por esa sentencia, aunque lo quiera disimular transmitiendo calma y obviando una realidad que no puede ser más preocupante para él y su familia.

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El exrepresentante de la de San Blas soplaba las velas de la tarta de su 45 cumpleaños rodeado de su familia, entre los que no faltaron su mujer Lorena y sus cuatro hijos. Nada que ver con la multitudinaria fiesta que prepara la Esteban para celebrar su victoria. Toño elegía una frase breve para agradecer las felicitaciones que le habían llegado de sus "espartoños". "Muchísimas gracias por todas vuestras felicitaciones por el día de mi cumpleaños. Fue un gran día el de ayer", escribía. ¿Exceso de confianza o postureo? Muchos son los que creen que Sanchís está haciendo auténticos esfuerzos por no dejar ver la angustia que se ha alojado en su vida desde que Belén Esteban le ganara definitivamente en los juzgados.

Una derrota frente a su exrepresentada que podría hacerle perder el hogar familiar y que solo supone una etapa legal superada para Belén, quien quiere seguir luchando en los juzgados, pero esta vez por vía penal.