Es aparecer Carlos Lozano por el plató de 'Sálvame' y 'Sábado Deluxe' y liarse. Carlos sabe cómo poner de los nervios a los colaboradores y, desde luego, lo consigue. Este sábado acudió al plató para hablar, otra vez, de su maxijuerga de hace diez días, pero también habló de otras muchas cosas. Belén, Chelo, Mila... todas acabaron enfrentadas al presentador. Chelo porque este considera que hace el ridículo en su 'Diario Che', Belén porque, una vez más, es criticada por Carlos por exponer sus miserias, a lo que la Esteban le responde que él hace exactamente lo mismo; y Mila, porque se puso en cuestión sus neuronas y su dignidad, lo que hizo que abandonara el plató enfadadísima.

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Carlos Lozano estuvo 40 horas en paradero desconocido y su familia lo denunció a la policía. Inicialmente, Carlos se enfadó por la trascendencia que había tomado su salida nocturna, pero luego se alegró de que, en el fondo, el asunto había servido para que su novia, Miriam Saavedra, y su ex Mónica Hoyos, se pusieran en contacto la una con la otra y hablaran.

Pero no solo de su gran juerga habló Carlos. El presentador se sometió al polígrafo y allí se abrieron varios melones, sobre todo en lo que a su relación con Miriam se refiere. Carlos afirmó que nunca le había sido infiel a su novia, pero el polígrafo dictaminó que mentía. El presentador solo admitió que es un hombre que le gusta tontear, pero de ahí a ser infiel media un abismo.

Lo gordo llegó cuando Carlos reconoció que en los últimos meses se había planteado romper con Miriam. La diferencia de edad, él tiene 55 y ella 23, es a veces un obstáculo. "Discutimos mucho. Ella no ha pasado por cosas que yo ya he pasado, pero estamos tan enamorados que luego se nos pasa todo", dijo Carlos.