En un nuevo giro de tuerca, 'Cámbiame' ha vuelto a reinventarse. "Por fin ha llegado el momento de ponerme en vuestras manos", rezaba la pantalla gigante de plató, sembrando la incertidumbre entre los estilistas. En esta ocasión, ha sido Carlota Corredera quien ha cruzado la pasarela para pedir a Pelayo, Natalia y Cristina para que le preparen el 'look' perfecto para la presentación de su primer libro.

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Carlota Corredera

El especial momento ha propiciado que los cuatro recordaran los primeros pasos de la presentadora cuando cogió las riendas de 'Cámbiame'. El momento de sinceridad brutal ha hecho que derramaran lágrimas y se fundieran en un emotivo abrazo de grupo. "¿Pero tan mal te lo hicimos pasar?", le ha interpelado Pelayo. A lo que ella ha respondido con ironía: "Fue un paseo". "Fueron unos principios muy duros porque quiero mucho a marta pero me ponía en vuestro lugar", ha reconocido finalmente, sin ningún tipo de rencor.

"Me pareces una tía fetén, eres superempática, buena compañera. Me costó cuando llegaste, por lo que perdía, pero en realidad no perdí nada. Una persona me dijo que había ganado una amiga e iba a ganar una nueva compañera que quizás se convertiría en mi nueva amiga. Y eres mi amiga, Carlota", se confesaba Natalia. "Con Marta tenía una hermana, pero con Carlota tengo una mamá", acababa diciendo.

Cristina también ha admitido que no fueron las personas más cálidas con el aterrizaje de Carlota para sustituir a Marta Torné, en los primeros días de 2017. "Cuando llegaste nos costó porque nos cuestan las cambios. Y aunque Marta es nuestra mamá, Carlota es mi aliada. Mis compañeras son más jóvenes que yo que se toman azúcar y se viene arriba. Y tú y yo somos la disciplina. Nos miramos y nos entendemos", brotaba de los labios de la veterana estilista.

El programa ha resultado ser un trayecto emocional y sentimental por la vida del presentadora, que ha contado en plató con el apoyo y el calor de sus directores David Valldeperas, Raúl Prieto, y su amiga, Belén Esteban. Aunque la mayor sorpresa que se ha llevado ha sido recibir una tarjeta con las huellas de las manitas de su pequeña Alba.

Carlota, adalid de la vida saludable que ha luchado por dar visibilidad al grave problema de la obesidad a nivel de salud y social, ha confesado que su "pico más alto fue la talla 60. Perdí un Pelayo. Imagínate moverte con todo ese peso de más. Tienes que hacerlo por ti, cuando te pones a perder esa cantidad de peso", le ha contado a su compañero de programa.

Con Rodríguez ha tenido la conversación más sensible, cuando ha hablado del amor y de lo que supuso conocer a su marido y padre de su hija Alba, Carlos de la Maza. "Soy una persona que en el amor lo doy todo y creo que yo he querido más de lo que me han dado. Encontré ese amor que no te hace sufrir casi a los 37 años. A pesar de los palos que me ha dado la vida, que han sido muchos y muy duros, y de atormentarme mucho con la idea de que no volvería a ser feliz, nunca perdí la esperanza".