Era la noche más esperada. Tras muchos meses de trabajo, de esfuerzos e ilusiones, Terelu Campos presentaba en sociedad su último proyecto. Bajo el nombre TRLU by Terelu Campos, la colaboradora lanzaba una línea de joyería que promete colarse en todos los armarios del país. Hasta allí se trasladaron las Campos al completo, los compañeros de Sálvame y muchos amigos dispuestos a pasarlo en grande. Tan solo hubo una ausencia notable. Una persona que no pudo acudir y que siempre ha estado ahí. Se trata, claro, de Alejandra, la hija de Terelu...

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Terelu Campos presentacion joyas Terelu

Los periodistas se agolpaban alrededor de la gran protagonista de la noche. Terelu Campos exhibía poder de convocatoria reuniendo a la plana mayor del momento en la presentación de TRLU by Terelu Campos, su nueva línea de joyería. Un proyecto al que ha dedicado mucho tiempo y esfuerzo y que ha revolucionado el mercado. Todo lo que tocan las Campos se convierte en oro y esto no podía ser diferentes. María Teresa, Carmen Borrego, Bigote y casi todo el clan al completo acudieron para arropar a la colaboradora.

Entre todos los invitados, una ausencia de las que llaman la atención. ¿Dónde estaba Alejandra Rubio? La hija de Terelu, siempre muy unida a su madre, no aparecía en la presentación y se formaba el revuelo. Por suerte, Terelu corría a aclararlo todo. “Está fuera”, explicaba la presentadora. “No os voy a decir donde”. Entre bromas y risas, le restaba importancia. “Ahora me ha mandado un mensaje”, confirmaba. Alejandra ha apoyado el proyecto de su madre también a través de redes sociales.

“Iba a venir pero tenía un viaje”, aseguraba. “Yo le dije 'no vuelvas por esto'”. La colaboradora y su hija siempre están muy pendientes la una de la otra. En su nueva faceta de influencer, desde luego, puede echar una mano al lanzamiento de las joyas. “La sigo muy poco en redes”, confesaba Terelu. “En eso, he sido una madre nada cotilla”. La colaboradora aseguraba que jamás le había mirado el móvil a su hija. “A mí me da una fatiga enorme. Vamos, me muero de vergüenza”.