Es difícil escribir esto. Duele. Pero queremos, sentimos que tenemos que decir adiós al 'jefe'. Ha muerto Juli Bou. Fue nuestro jefe y así le sentimos hasta el final. Director de Lecturas desde 1956 hasta 1995, Bou moría el domingo 22 de junio en Barcelona a los 84 años.

Se iba como vivió, rodeado de su gente. A su lado estuvieron hasta el último instante su esposa, su inseparable Consol, con quien tuvo a sus siete hijos: Jordi, Oriol, Eulàlia, Catalina, Lluís, Mercè y Núria. Todos estuvieron ahí para decirle adiós. Una numerosa familia fuerte y unida. Ese es el legado más preciado que deja nuestro 'jefe'. Un hombre, un maestro, un periodista de raza que logró formar también -y se ha ido sabiéndolo,- otra gran familia: la nuestra. La de todos los que tuvimos la suerte de cruzarnos en su camino. Hoy estamos tristes, le lloramos y no podemos evitar recordar lo que vivimos a su lado.
Algunos durante más tiempo que otros, pero todos por igual, aprendimos de él y con él. No solo nos enseñó a hacer esa revista que seguimos haciendo cada semana, sino que nos enseñó a disfrutar haciéndola. Fue un gran maestro.
Llegó al grupo editorial Hymsa (El HOGAR Y LA MODA SA) en 1951. Tenía 21 años y había estudiado dos cursos de ingeniería industrial. Pero pronto vio que el periodismo era lo suyo y empezó a estudiarlo en la universidad. Compaginaba sus estudios de Periodismo con su trabajo en la Sociedad General de Publicaciones, fue delegado de la agencia Europa Press en Barcelona y en 1956, el mismo año en que terminaba la carrera, era nombrado director de Lecturas, revista que acaba de cumplir 92 años de vida. En sus inicios era un suplemento literario mensual y que pronto pasaría a semanal. Bou fue el responsable de su refundación como una revista de actualidad y famosos. Empezaba una larga trayectoria profesional en la que puso ilusión, empeño, esfuerzo, dedicación y esa sabiduría que solo tiene la gente buena. Porque el 'jefe' era por encima de todo buena gente.
Al frente de Lecturas vivió momentos históricos como la boda de Fabiola y Balduino de Bélgica, ese sería su bautizo como director. Llegarían después el enlace de Juan Carlos de Borbón y Sofía de Grecia y la muerte de la princesa Grace de Mónaco. Muchos recuerdan hoy su valentía cuando publicó en portada el nacimiento de Victoria Ana, la primera niña probeta, o su decepción al ver que Jackie Kennedy se casaba con Aristóteles Onassis. Bou no entendió nunca ese enlace, pero consiguió publicar la única imagen de la boda que se vio en España. Era el año 1968.
Juli Bou dejó el cargo de director de Lecturas en 1995 en manos de su sobrina Catalina Vidal con quien llevaba ya trabajando codo con codo más de 15 años. Lecturas siguió su camino y Juli se volcó en su otra familia. Esa que había crecido y crecido casi tanto como la que había formando con nosotros. Hoy 22 nietos lloran a 'l'avi' (el abuelo). Nosotros a nuestro 'jefe'. Trabajar junto a él fue un placer. Recordarlo lo será siempre. El grupo RBA, propietario desde hace siete años de LECTURAS, desea enviar sus condolencias a toda la familia Bou y mostrar su respeto por un hombre y un periodista irrepetible. Descanse en paz.