A mes y medio de haber dado a luz, Soraya vuelve a ponerse en forma

La modelo y diseñadora, aficionada a la vida sana y natural, asegura que el mismo día de haber dado luz a Manuela, su primera hija, hizo yoga. Este deporte no la ha abandonado en sus embarazos y recomienda practicarlo para aliviar dolores en la espalda y tener buena flexibilidad de cara al parto.

Algunas madres tienen la suerte de que pierden mucho del peso ganado durante los 9 meses dando el pecho. Es verdad que amamantar quema una gran cantidad de calorías y que mucha de la hinchazón provocada por el nacimiento, disminuye con las tomas del niño.

No es de las que te miente diciendo que "bebiendo agua recuperó su cuerpo de antes de la maternidad". Todo eso es mentira. La modelo, que es muy cuidadosa con su alimentación, extremó su dieta. Aparcó los azúcares de las frutas y los cereales, y se ciñó a los procedentes de verduras. Aumentó la ingesta de proteínas y le dio muy duro al gimnasio, 'sufriendo' entrenamientos de dos horas con su entrenador personal.

Nada de café, lácteos, pan blanco o alcohol. Debía comer 5 veces al día pequeñas comidas en las que verduras como la coliflor o el brócoli solían estar presentes y realizó toneladas de ejercicio. Su entrenador le adecuó una rutina con pesas basada en la repetición para tonificar su cuerpo.

Otra mujer que aboga, al igual que Patricia Montero por los abdominales hipopresivos. Estos fueron definitorios para que su vientre volviera a ser el que era y para que sus órganos internos se 'recolocaran'. También funcionan fenomenal para hacer más fuerte el suelo pélvico.

Dice la leyenda urbana, que a la colombiana la han acompañado en cada uno de sus partos un cirujano estético,  que, aprovechando la anestesia del alumbramiento, conseguía que el abdomen de la artista luciera de lujo a las pocas horas del nacimiento. Ella jamás ha confirmado que esto sea cierto, y siempre ha reconocido que volver a tener las medidas pre-embarazo le gustan muchas horas de entrenamiento.

La actriz recomienda las infusiones que ayudan a acabar con la retención de líquidos y asegura que estas fueron sus mejores aliadas una vez nació Esmeralda.

Parece que todas coinciden en lo mismo. Embarazada que se mantiene en activo, mujer que se recupera antes tras el parto. Mila lo ha hecho dando largas caminatas acompañada de sus perros. Cada día salía a andar 10 kilómetros.

Una cosa os decimos, muchas famosas tienen la suerte de engordar poquísimo en el embarazo, como le pasó con su primera hija la actriz Amaia Salamanca. Tan solo subió 10 kilos que, con un poco de paciencia, perdió sin problema. Aseguró vigilar más sus comidas y optar por los hipopresivos

A veces no se habla de las fajas y Sienna les ha dado algo de visibilidad. Cuando se da a luz, todavía queda una barriga parecida a la que te has estado viendo durante los últimos meses. Con las semanas (o los meses) todo vuelve a la normalidad, pero a veces es necesario recurrir a esa ayuda extra que aportan las fajas.

Cada día comía un enorme desuyuno, seguía con un almuerzo pequeño y una cena aún más pequeña. Vamos lo que siempre han dicho nuestros abuelos: "desayunar como rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo". Ella además debía tomar dos snaks saludables. A diferencia de otras famosas, continuó tomando carbohidratos y lo hacía siempre escogiendo su versión integral.

Además, entrenó muy duro. Cada día (seis días a la semana) dedicaba de 45 minutos a dos horas a hacer los ejercicios que le había mandado su 'personal trainer'.

La actriz pasó largas horas en la piscina tras el nacimiento de sus bebés. A los largos se le sumaban ejercicios específicos de resistencia para hacer dentro del agua, que combinaba con sentadillas en suelo firme.

Pero de todas ellas nos quedamos con lo que Hilary Duff comentó en una entrevista a US Weekly: "Creo que todas las mujeres que han pasado por un embarazo te dirán que quieren de vuelta su cuerpo de antes. Pero eso lleva tiempo. Ahora, cada vez que pienso '¿pero qué le ha pasado a mi cuerpo?', miro a mi precioso hijo y nunca antes había apreciado tanto el cuerpo que tengo". ¡Esa es la actitud!